Gesto moderno
Ayelén Arostegui estudió Letras; hoy diseña. En su atelier Higo comparte básicos con código sastrero y no abre solo su biblioteca, también sus subrayados.
En el bullicio porteño, Ayelén Arostegui propone un pulso muy propio a través de Higo, su reciente etiqueta sastrera. El atelier-tienda está en un edificio clásico de techos altos en el microcentro extendido de la ciudad, pero la ansiedad urbana se queda afuera. En sus modos hay una noción paralela del tiempo. Ayelén se formó en Letras en la Universidad de Buenos Aires y luego estudió Políticas Públicas en la Universidad Di Tella. Durante varios años trabajó en el sector público y también en corporaciones. Hasta que barajó y dio de nuevo. “No encontraba este tipo de prendas, por eso nació Higo”, explica sentada en su escritorio junto a una pila de ejemplares de la revista inglesa The gentlewoman, a la que está suscripta. Ese hábito analógico la describe.
L’OFFICIEL: ¿Cómo se proyectó Higo?
AYELEN AROSTEGUI: Durante un año y medio trabajamos en una colección base: el Volumen 1. Realmente fue la base porque todo lo que seguimos haciendo está inspirado en esa línea. Creamos muchos diseños y generamos un montón de interacciones. Fue hacer y deshacer. Los códigos sastreros y la ropa de trabajo se sostienen. Siempre pensamos en ropa de trabajo, en cosas que te querés poner todos los días. Tenemos colecciones anuales, la clave es que las prendas duren.
L’O: ¿Usás tus prendas?
AA: Todo el tiempo.
A diferencia de las exigencias del mercado, Higo se define por sus colecciones de carácter anual. Los primeros dos años presentaron una serie de prendas en un mismo momento; ahora las colecciones se lanzan de modo progresivo para poder generar novedades con mayor frecuencia. Además, vuelven sobre sus propias piezas: repiten las que funcionan y transforman aquellas que pueden ajustarse o variar. Hay una fórmula práctica en el armado de colección que se sustenta en la precisión en la realización y elección de los materiales.
“Marginalia es una sección en la cual invitamos a escritoras a indagar sobre el mundo analógico, la ropa, los detalles”
L’O: ¿Cuál es el vínculo con quienes visten Higo?
AA: Las clientas son muy leales: una vez que nos conocen, vuelven. También tenemos pedidos a medida.
L’O: ¿En qué trabajás hoy?
AA: Estamos diseñando el Volumen 4 para presentarlo en 2025. Hoy lo que más me interesa es seguir desarrollando Marginalia, una sección en la cual invitamos a escritoras a indagar sobre el mundo analógico, el mundo de la ropa, los detalles. Es algo que quiero seguir explorando. Además, estamos trabajando en tener más presencia en tiendas.
Ayelén está dedicada a idear un sistema mientras construye vínculos con mujeres que potencian el proyecto. Del mismo modo que en el atelier cada prenda tiene su espacio y destaque, en higobuenosaires.com es posible encontrar textos pensados específicamente para la marca. Incluso la web puede funcionar como una suerte de índice de lecturas y objetos para el disfrute. No se trata de velocidad sino de perdurar.